lunes, 29 de junio de 2015

Cora y su matrimonio

La vida de Cora, sin dudas era mágica, ella se daba cuenta de todo lo que le sucedía pero había veces que su fe se perdía y tambaleaba.
Ella decía "-He sembrado amor y cosechado gusanos que me comieron la carne, por suerte la carne crece, soy como la lombriz, le cortan un pedazo y sigue viviendo como si nada hubiera pasado".
Un solo gran amor había invadido sus jardines del alma. Imperfecto como todo amor, pero era su "amado inmortal". Entre su amado y la fecha en la que la conocí, El ya había muerto...Y SÍ LOS DESTINOS SUELEN SER IMPREDECIBLES IMPREVISIBLES
Siempre desde pequeña había buscado aprobación siendo una niña que dejaron de lado por los hijos de su hermano mayor, trece años mayor.
Siempre se las arregló sola, alumna media, no daba problemas y parece que en la sociedad en la que ella vivía quién no da problemas subsiste A MEDIAS, respira y ES en las sombras aunque brille...La trataban como a una persona adulta siempre....pero ella había tenido un mecanismo de defensa que la hizo ser niña aún cuando yo la conocí, aunque la adulta llorara la niña que tenía dentro jugaba todo el tiempo.
Se debatía entre el amor, las muertes de tantos seres queridos...se habían muerto una docena de personas de su entorno cercano, aunque no tenían edad para hacerlo, si es que existe la EDAD DE LA MUERTE...
Ella había convivido con un joven que luego de estar un año y meses con ella, incluso en el exterior el joven había tenido un accidente cerebro vascular a los meses de ella dar por terminada la relación.
Conoció allí al que fuera su marido durante ásperos siete años, una persona que pensaba que todas las mujeres son PUTAS, la pobre y joven Cora quería demostrarle que se podía ser fiel, amar, tener una familia. Buscaron un bebé, lo tuvieron y en el momento de quedar embarazada Cora dejó de tener problemas con sus desordenes de la alimentación y allí fue la primera vez que vio, en sueños a la virgen María que viendo que ella se quedaba sin órganos, con el Niño Jesús en los brazos, se sacó el corazón del pecho y se lo dio.
Desde ese día Cora, estando embarazada dejó de vomitar o de darse atracones. LA VIRGEN HABRÍA TENIDO QUE VER CON ELLO...una pregunta que siguiendo la historia de Cora Luz insiste en ser protagonista de su vida.
Su marido la mantuvo alejada de sus amistades, le prohibió ejercer el periodismo, la producción y poco a poco Cora fue cediendo, primero por amor, luego para no tener peleas su lugar y haciéndose chiquita dentro de su grandeza....otra vez a cumplir el rol que había tenido en su infancia, ésta vez en vez de ser su cuñada manipuladora y oscura era su propio marido....elegido por ella quien la ponía debajo de su zapato.
No tenían sexo, ella trabajaba desde las nueve de la mañana hasta las nueve de la noche a diario, a veces hasta los domingos...el niño era cuidado por la abuela materna.
El marido de Cora celaba al niño....no se qué calificativo ponerle si psicópata o directamente enfermo mental. El tipo tenía problemas de relación con su padre, con su madre...ambos depresivos. Ella interesada casada con un hombre de buena posición diez años menor, vio la salida a su no liquidez económica mediante quedar embarazada a los cuarenta y cinco años de una hija de éste hombre generándole más problemas a su hijo el marido de la polifacética Cora.



Cintia Saptié

No hay comentarios:

Publicar un comentario